Nacional
Prepara Familia advierte que expectativas para quien necesite un trasplante en Venezuela son muy bajas

El 1 de junio de 2023, se cumplieron 6 años de la suspensión del sistema de trasplantes en Venezuela.
Katherine Martínez, directora de la ONG Prepara Familia y activista por los Derechos Humanos, advirtió que las expectativas para alguien que necesite un trasplante en Venezuela son muy bajas y no ven luces en este momento.
Recordó que desde el 2014, se empezó a ver una caída de todo este sistema.
«Solo en noviembre de 2022 se hizo un trasplante de vivo a vivo en el JM de los Ríos, con esto se creó una expectativa de algo que no iba a pasar» añadió.
Martínez explicó que la realidad de los venezolanos que necesitan trasplantes es que no tienen los medicamentos que requieren ni la alimentación necesaria.
«Vemos luces mínimas en esta área porque la reactivación de este programa está relacionado con la reactivación como tal del sistema de salud del país» acotó.
Indicó en que en el sistema de procura de órganos no ha permeado la ayuda humanitaria, aunque hay avances en proyectos en el sistema de salud.
Por su parte Anabela Arminio, médico nefrólogo, maestría en bioética y asesor médico de la Organización Nacional de Trasplantes de Venezuela, destacó que los trasplantes son costosos y requieren muchos recursos antes de este y después.
Resaltó que la calidad de vida de una persona trasplantada aumenta exponencialmente y las posibilidades de reinserción en una vida normal son altas.
Arminio señaló que un trasplante exitoso hoy no es la novedad, es lo obligatorio si se tiene el suministro adecuado de recursos y medicamentos.
«Si el paciente opta por un trasplante de donante vivo, el tiempo para hacer el reemplazo dependerá de la capacidad de respuesta que tenga el donante y el paciente para realizar todas las evaluaciones» dijo.
Unión Radio
Noticias
La amenaza de una extracción obliga al Alcalde Oropeza a pedir protección en España

Luego de recibir amenazas y ser víctima de seguimientos e intercepciones en plena vía pública por parte de sujetos desconocidos, el alcalde Javier Oropeza se vio obligado a abandonar la vecina Colombia y pedir protección en España, donde se encuentra actualmente acompañado de su familia.
Oropeza, previamente a su partida para España, hizo formal denuncia ante la Fiscalía General de Colombia, según expediente 2025032800583, de seguimientos y persecuciones que lo hacen temer un eventual secuestro y posterior extracción a Venezuela.
Quizás el más evidente ocurrió el pasado 26 de marzo, en momentos que transitaban por una calle de Barranquilla -Colombia- acompañado por su esposa Anibys de Oropeza, el concejal de Torres Ronald Machán y el jefe del Departamento no de Desarrollo Social de la Alcaldía de Torres, Leslie Timaure; cuando fueron interceptados por sujetos que tripulaban una camioneta gris que los obligó a detener la marcha.
De ese vehículo se bajó uno de los sujetos que se dirigió hacia ellos; una rápida maniobra de Timaure frente al volante les permitió evadir al desconocido que lograron fotografiar, y cuya gráfica fue consignada en fiscalía como prueba.
Los sujetos de la camioneta comenzaron a seguirlos, una persecución que los hizo dar vueltas hasta que se estacionaron frente a un módulo policial luego de lo cual dejaron acosarlos.
Oropeza advierte que no fue esa la primera y única vez que sintió seguimientos. En varias oportunidades, incluso dentro de supermercados, ha notado la presencia de sujetos que lo siguen.
Una llamada proveniente de una ONG encargada de ayudar a los venezolanos refugiados en Colombia le previno de un probable secuestrado y eventual extracción a Venezuela, un plan que se estaría gestando en el consulado de Venezuela en Barranquilla.
Javier Oropeza, junto a su familia, fueron recibidos en España por la diáspora venezolana, quienes los acompañaron a solicitar asilo a propósito de las persecuciones políticas contra él, su esposa e hijas, en Venezuela y Colombia, luego de los sucesos postelectorales del 28 de julio.