Internacional
Un peruano buscará el récord Guinness como el hombre más longevo del mundo

El Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (Midis) de Perú informó que postulará al récord Guinness a Marcelino Abad Tolentino, que tiene 124 años de edad según documentos oficiales de ese país, como el hombre más longevo del mundo.
“Marcelino Abad, usuario emblemático de Pensión 65 en (la ciudad de) Huánuco, es el peruano que acaba de cumplir 124 años y va rumbo al récord Guinness como el hombre más longevo del mundo”, confirmó el Midis en su cuenta de X (antes Twitter) el 8 de abril de 2024.
El gobierno peruano realizó el anuncio varios días después de la muerte del venezolano Juan Vicente Pérez, quien poseía el título desde 2019. El tachirense falleció el 2 de abril a los 114 años de edad.
Tras la muerte de Pérez, el récord Guinness como el hombre más longevo del mundo lo obtuvo el inglés John Tinniswood, con 111 años y 223 días. Mientras que el título a la mujer más longeva del mundo lo ocupa la española María Branyas Moreira, con 117 años.

Sobre la solicitud del récord Guinness
Las autoridades de Perú explicaron a la organización internacional que Abad, mejor conocido por sus familiares y amigos como “Mashico”, vivió toda su vida aislado y con contacto limitado con la tecnología.
Por esta razón, el peruano obtuvo su primer documento de identidad en 2019, cuando fue encontrado por miembros del programa social Pensión 65, en la provincia de Ambo (Perú).
Marcelino Abad vive desde 2022 en la casa hogar para personas de la tercera edad Mis Abuelitos, junto con otros 28 adultos mayores, donde recibe los cuidados pertinentes a su salud.
“Con mucho orgullo, Marcelino confesó que uno de sus secretos para mantenerse sano y optimista, es comer los frutos que le proporciona la naturaleza, aunque también le gusta comer carnero, en diferentes platillos”, señaló el Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social de Perú en un comunicado.
Además, Abad compartió que otra de sus costumbres es mascar hojas de coca, como un hábito que adquirió cuando realizaba sus jornadas de trabajo hace varias décadas.
La vida de Marcelina Adad
Según las autoridades peruanas, Abad nació el 5 de abril de 1900 en Huánuco, Perú, y a los 7 años de edad quedó huérfano, cuando sus padres murieron al intentar cruzar un río. Tras este suceso, fue adoptado por los dueños de una hacienda en el distrito de Chaglla, pero nunca asistió a la escuela, de acuerdo con información del gobierno peruano.
La vida de Abad transcurrió mayormente en el campo, rodeado de animales y trabajó vendiendo platos típicos de la zona. Hasta donde se conoce, el huanuqueño no se casó y no tuvo hijos.
“Siempre vivió en zonas rurales y supo aprovechar las bondades de la naturaleza para desarrollar un estilo de vida saludable”, afirmó el Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social de ese país.
Abad contó a varios medios de comunicación de Perú que otro de sus “secretos” para la longevidad es llevar una vida tranquila, sin estrés. Además, reveló que a los 120 años de edad aún se encargaba de cultivar y cosechar sus alimentos.
El Diario.com
Noticias
HRW incluye en su informe golpe desde el Gobierno al poder municipal de Torres

Human Rights Watch incluyó en su informe sobre los hechos suscitados en Venezuela luego de los comicios del 28 de julio, el caso de la Alcaldía del Municipio Torres, donde se produjo un golpe desde el gobierno a la majestad del poder municipal, legal y constitucionalmente constituido desde el año 2021.
El informe recoge los hechos que desembocaron en una despiadada persecución contra el alcalde Javier Oropeza, su familia y buena parte del tren ejecutivo, una trama orquestada por la dirigencia local e instituciones del estado afectas al partido oficialista, Psuv, dejando entrever una conspiración que solo buscaba apoderarse de la Alcaldía de Torres por vías distintas al electoral.
Se incluyen detalles de cómo se desarrollaron los hechos, en los cuales participaron, además de la dirigencia local del Psuv, el prefecto Elvis Méndez, el gobernador Adolfo Pereira, tribunales de la república y fiscales del Ministerio Público al servicio del régimen. También el Concejo Municipal controlado por ediles oficialistas, que bloqueron con notorias intenciones el Departamento de Publicaciones, bloqueando así la edición de gacetas contentivas de resoluciones y decretos emitidos por el alcalde Javier Oropeza como primera autoridad civil del municipio.
El caso de la Alcaldía de Torres sirve como ejemplo de similares actuaciones desde el régimen contra otras municipalidades en manos de alcaldes opositores, obligados al exilio unos y encarcelados otros.
Unos 50 funcionarios de distintos niveles de la municipalidad torrense tuvieron que salir al exilio, luego de ser objeto de visitas domiciliarias y persecuciones por sujetos vestidos de negro y conduciendo vehículo sin identificación oficial.
En un principio solo mencionaban los nombres del alcalde Javier Oropeza, el director de gobierno Jesús Guillermo Gómez y los concejales opositores Wilman Montero y Ronald Machán. Casi de inmediato la nómina se fue ampliando y rebazó el vaso cuando un vehículo vinotinto entrompa a un grupo de directores que caminaba por una acera adyacente a la alcaldía, siendo secuestrado en un instante el director de gobierno abierto, Endrick Medina, quien hoy día sigue detenido en el Sebin.
Las persecuciones y amedrentamiento no cesaron. Se extendieron contra familiares y bienes patrimoniales de funcionarios municipales. Al alcalde Javier Oropeza le confiscaron la sede de 2 periódicos, su casa familiar en Carora y la finca agropecuaria, un patrimonio familiar y de la ganadería raza Carora; en tanto a la Lcda Iraida Timaure, le confiscaron su casa, su vehículo y el de su hija, además pusieron en fuga a su esposo, también hoy día en el exilio, de lo contrario lo hubiesen detenido.
Este informe dado a conocer por Juanita Goebertus, directora de la división de las Américas de Human Rights Watch, fue elevado a la consideración de la Comisión de Derecho Humanos de la ONU, como también a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de la OEA.