Regional
Denuncian que 10 pacientes de la Unidad de Diálisis Barquisimeto han muerto en lo que va de 2024

osé Torrealba es el décimo paciente de la Unidad de Diálisis Barquisimeto que muere en lo que va del año por complicaciones asociadas con su diagnóstico de falla renal. Una representante de la Fundación Amigos del Paciente Renal de Lara (Fundaprel) explicó que el hombre sufrió un ataque cardíaco en la Unidad de Diálisis Barquisimeto y que el centro asistencial no tiene las condiciones para atender una emergencia de este tipo.
Con Torrealba, son en total 10 los pacientes de la Unidad de Diálisis Barquisimeto que han muerto entre enero y junio de este año, de acuerdo con Fundaprel. Actualmente, este centro atiende a 235 personas que requieren tratamiento y no tienen opción de un trasplante renal.
La hemodiálisis es una terapia que sustituye la función renal, es decir, que se encarga de filtrar y eliminar las toxinas de la sangre y evita la retención de líquidos. Si una diálisis no es de calidad o la máquina falla, el paciente corre el riesgo de que toxinas como la urea se eleven en el cuerpo y afecte el resto de los órganos vitales.

“Llama la atención que en tan poco tiempo, menos de seis meses, hayan muerto ya 10 pacientes. ¿Por qué muere un paciente? Porque las máquinas no están funcionando ni liberando las toxinas. Si la urea se eleva mucho es un contaminante muy grande para el cuerpo y la persona colapsa, por eso necesitamos máquinas para diálisis de calidad”, señaló.
No es un problema nuevo
La vocera de la Fundaprel explicó que los pacientes tienen alrededor de cuatro años denunciando ante el Ministerio de Salud y ante la autoridad única de salud del estado Lara, el doctor Javier Cabrera, los problemas con las máquinas en la Unidad de Diálisis Barquisimeto.
En este momento la unidad tiene 10 máquinas inoperativas por completo y 27 que necesitan cambio de motores. Camacaro agregó que hay otro número indeterminado de equipos que necesitan mantenimiento de otro tipo.
“Hay máquinas que un día funcionan y al otro no. A veces los pacientes tienen que esperar por otro turno para poder conectarse porque la máquina amaneció dañada, porque son máquinas que tienen muchos años en funcionamiento”, dijo la representante de los pacientes renales.
Explicó que esas máquinas son del modelo 2008-S de Fresenius, empresa que fabricaba y contaba con el personal técnico para reparar las máquinas. Indicó que dicha compañía tiene al menos 7 años fuera de Venezuela, por lo que los equipos no tienen un mantenimiento adecuado y se dificulta la obtención de motores para el reemplazo que necesitan varias máquinas.
Condiciones de la Unidad de Diálisis Barquisimeto
Además de las fallas con las máquinas de diálisis, la unidad tiene algunas deficiencias que afectan al momento de presentarse una emergencia con los pacientes.
Camacaro indicó que en este momento no tienen un carro de paro cardíaco. Este es un equipo que debe contar con un desfibrilador para reanimar el corazón. También deben tener equipos de intubación o traqueotomía, sueros fisiológicos y medicamentos necesarios para emergencias cardíacas.
Destacó que el paciente renal suele presentar hipertensión arterial y por tal motivo corren riesgo de sufrir ataques cardíacos durante las diálisis y es una prioridad contar con lo necesario para atender una emergencia. Agregó que tampoco hay equipos de electrocardiograma para monitorear la actividad reciente del corazón del paciente para el control cardiovascular.
Indicó que el Instituto Venezolano de Los Seguros Sociales (IVSS) se encarga de entregar semanalmente los medicamentos que los pacientes deben recibir durante las diálisis como vitamina B, hierro y eritropoyetina. Sin embargo, hay un fármaco llamado zemplar, para el cual les exigen a los pacientes hacerse una serie de exámenes antes de entregarlos.
“Todos esos exámenes de laboratorio salen en un costo de 70 u 80 dólares y la mayoría de los pacientes no tiene ese dinero porque por su condición no pueden trabajar y por sus malas diálisis no pueden incorporarse a la sociedad. Quisiéramos que el seguro social no exigiera tanto para entregar el zemplar”, dijo.
Este medicamento ayuda a regular los niveles de parathormona en el cuerpo. A los pacientes en diálisis se les eleva esta hormona y produce un deterioro severo en el cuerpo.

La vocera de Fundaprel hizo un llamado para que atiendan la situación de la Unidad de Diálisis Barquisimeto lo antes posible y que se busque el reemplazo y mantenimiento de las máquinas para que los pacientes puedan tener hemodiálisis de calidad.
El Diario.com
Regional
Yenny Barrios, presa política de Lara, inicia tratamiento de quimioterapia tras las rejas

Tras varias solicitudes realizadas por parte de sus familiares, finalmente, Yenny Barrios, paciente oncológica detenida en el contexto postelectoral en el estado Lara, pudo recibir su primera quimioterapia, sin recibir una medida cautelar por parte de los tribunales correspondientes.
Yenny Barrios, detenida el pasado mes de septiembre en la ciudad de Carora, permanece detenida en la comisaría de la Policía Nacional Bolivariana de Pata e’ Palo en la ciudad de Barquisimeto. Padece Linfoma no Hodgking y es acusada de terrorismo.
A través de las redes sociales, el único hijo de Barrios, Diego Sierralta, hizo las diferentes solicitudes para que su madre recibiera atención forense y de esa forma iniciar con el tratamiento de quimioterapia.
Finalmente, Sierralta logró que su madre fuera evaluada, y tras realizar todas las gestiones ante el Seguro Social, este lunes y martes recibió el primer ciclo de nueve quimioterapias que conforman el tratamiento, el cual debe realizarse cada 21 días.
Es necesario mencionar que, además de gestionar el traslado de Yenny Barrios desde la comandancia de Pata e’ Palo hasta el centro de salud, Diego Sierralta ha tenido que gestionar la adquisición de los medicamentos, entre otros, dos medicinas que no las tiene el Seguro Social.
Comentó Diego que su madre requiere 600 miligramos de Rituximab, el cual tiene un costo de 1.000 dólares la ampolla, y Cardioxane, que debe conseguir para que su madre pueda continuar el tratamiento.
Diego Sierralta manifiesta también su preocupación ante la negativa de los tribunales de otorgarle una medida cautelar y otorgar la libertad plena a su madre y que esta pueda recibir atención fuera de las rejas.
Menciona que ella recibe el tratamiento, pero que una celda o un centro de detención no es el mejor lugar para que una paciente oncológica pase la convalecencia y los efectos propios que deja el tratamiento oncológico, los cuales ameritan ser monitoreados por personal de salud.
Ante eso, detalla que continúa alzando su voz para que los tribunales accionen a favor de su madre y de esa forma ella pueda alcanzar la recuperación total en libertad.
Cortesía La Patilla