Mario Sosa / Foto: Cortesía
Cansados de las excusas y falsas informaciones por parte de Hidrolara, habitantes de Calicanto cerraron parte de la avenida Isaías Ávila como medida de protesta ante la falta de agua en la zona.
Entre las peticiones de los afectados, solicitan la presencia del prefecto del municipio Torres para que les de la cara y una pronta solución en cuanto al suministro del líquido vital.
Los vecinos alegaron que están cansados de la burla por parte de la Hidrológica del estado Lara, ya que no poseen los recursos de cancelar un cisterna privado con precios que oscilan entre los 7 y 10 dólares, debido a que el precio varía por la ubicación de la vivienda entre otras cosas para poder requerir dicho servicio.
Desde que fueron anunciadas las reparaciones para mejorar la distribución de agua, habitantes de Calicanto recalcan que siempre pasa algo cuando le corresponde al bloque 10.